
Rev. Méd. RosaRio 91: 15-22, 2025
REVISTA MÉDICA DE ROSARIO16
Introducción
Existen muchos mitos con relación al crecimiento en
niños. Muchos de estos mitos radican en problemas de
mala interpretación de la evidencia cientíca. Así mis-
mo, también hay conceptos que, si bien no son mitos,
son errores frecuentes de hallar en la práctica médica y
pueden llevar no sólo a errores en el proceso diagnóstico
sino también de tratamiento. Ejemplos de estos errores
son pensar que si el percentil de talla luego del primer
año de vida disminuye esto necesariamente implica una
anomalía,
1–3,4
recomendar el uso de vitamina D para
mejorar el crecimiento,
5
o armar que es normal que
un niño sano y sin talla baja reciba hormona de creci-
miento recombinante humana (somatropina) con nes
estéticos.
6
Por tanto, esta revisión pretende abordar de
forma puntual y haciendo referencia a bibliografía cien-
tíca varios de los conceptos erróneos que tienen que
quedar claros, principalmente para el personal de salud
o aquel involucrado en el desarrollo de políticas de salud
pública.
Métodos
Para la presente revisión se hizo una búsqueda
bibliográca tanto de artículos cientícos como de
capítulos de libros en endocrinología pediátrica desde
el 2010 hasta la actualidad.
Para la búsqueda de artículos cientícos se revi-
só las bases de datos PubMed y Scopus utilizando
los términos “short stature”, “height”, “children”,
“midparental height”, “genetics”, “growth velocity”,
“growth hormone”, “growth hormone deciency”,
“recombinant human growth hormone”, “somatro-
pin”, “malnutrition”, “nutritional deciency”, “zinc”,
“vitamin D”, “cholecalciferol”, “arginine”, “nutritio-
nal supplements”, “exercise” y “sleep”.
Así mismo, se buscó títulos de libros sobre en-
docrinología pediátrica o crecimiento en niños en
la base de datos Google Scholar utilizando términos
de búsqueda en inglés: “pediatric endocrinology”,
“growth” y “children”; y en español: “endocrinología
pediátrica”, “crecimiento” y “niños”. Se obtuvo los
textos completos de los libros seleccionados y se revi-
só la información pertinente contenida en capítulos
relacionados al crecimiento en niños o desórdenes del
crecimiento.
A continuación, se da respuesta con evidencia
cientíca a 19 preguntas sobre errores frecuentes so-
bre conceptos de talla baja en niños.
1. ¿Todos los tipos de instrumentos de medición de
talla son válidos?
La respuesta es no. Los brazos de metal plegables
para medir la estatura acoplados a la parte superior de
un mástil que en la base está unido a una balanza pue-
den llevar a errores de medición debido a problemas con
la postura del niño y a que el ángulo que forma el brazo
de metal extendido con el mástil al momento de tallar al
paciente es muy variable.
1,7
La estatura en mayores de 2 años debe medirse de
pie,
7
con un estadiómetro montado en la pared.
1
El
niño debe estar parado con la espalda hacia la pared, sin
zapatos, habiendo retirado cualquier accesorio de cabe-
llo que interera, y colocando la cabeza en el plano de
Frankfurt (los márgenes inferiores de las órbitas y los
márgenes superiores de los canales auditivos colocados
en el mismo plano horizontal, es decir, mirando de fren-
te).
1,7
La placa que va sobre la cabeza para leer la estatura
debe estar colocada de forma perpendicular a la pared.
1
La longitud de los infantes se mide de forma simi-
lar, pero colocando al individuo echado en un infan-
tómetro.
1,7
Se usa una tabla rme sobre la que se echa
al paciente, con una placa ja debajo de la cual va la
cabeza y una placa móvil que va debajo de los pies para
la lectura.
1
Dos personas son necesarias: Una para su-
jetar la cabeza en el plano de Frankfurt, mirando hacia
arriba, y otra para mantener las rodillas derechas y llevar
la placa de medición hacia los pies, los cuales también
deben estar perpendiculares a la tabla.
1
Muchas veces, el
personal de salud mide a los infantes sin ayuda y usan
una cinta métrica para cuanticar la longitud del infante
sobre una cama sin usar algún tipo de infantómetro, lo
cual es muy inexacto.
1,7
2. El percentil 50 de talla para la edad: ¿Es el ideal de
talla para la edad?
La respuesta es no. Si queremos saber si un niño de
8 años tiene una talla normal, lo primero que se necesita
tener es la información de la talla de la población de ni-
ños normales de 8 años.
8
Para lograr esto se debe recoger
la información de la talla de individuos de 8 años perte-
necientes a una muestra representativa (sujetos seleccio-
nados al azar y siguiendo técnicas que aseguren que el
conjunto seleccionado represente a la totalidad de niños
sanos de 8 años de una población).
8
Al hacer esto uno
notará rápidamente que no todos los niños saludables
tienen la misma talla. Si uno ordena los datos de las ta-
llas de menor a mayor en una la y buscamos dónde está